En el juicio que se lleva a cabo para determinar si siete trabajadores de la salud son culpables por el fallecimiento del argentino, surgieron varias revelaciones.
El médico de cabecera de Diego Armando Maradona, Leopoldo Luque, falsificó un informe y registró falsamente haber sido él quien llevó a cabo la última operación del ídolo argentino, según relató este jueves durante el juicio por su muerte el cirujano Rodolfo Benvenuti.
Benvenuti, el primer testigo de la audiencia de este jueves, explicó que fue convocado por el exabogado e íntimo amigo de Maradona, Víctor Stinfale, para evaluar si Luque era el indicado para operar al exfutbolista del hematoma subdural en la cabeza por el que fue intervenido el 3 de noviembre de 2020, tres semanas antes de su muerte.
El cirujano consideró que Luque, quien era neurocirujano pero se dedicaba a operaciones de espalda, “no estaba a la altura” de la tarea de intervenir al ídolo, una decisión que fue respaldada por las hijas de Maradona.
“Se dio una situación bastante tensa sobre quién operaba a Diego Maradona. Stinfale tuvo un cruce fuerte con Luque, un cruce fuerte, fuerte, porque Luque insistía con que lo iba a operar él”, contó este jueves Benvenuti frente al tribunal.
Según él, “Luque llegó a decirle a Stinfale que le estaba quitando la oportunidad de su vida”, y tras confirmarse la decisión de que no sería él quien llevara a cabo la operación “entró en una especie de crisis emocional, lo superó todo lo que estaba viviendo, se puso a llorar”.
Benvenuti relató además que “Luque accedió a no operar a Maradona cuando Stinfale le dijo que a él no le importaba si él ponía su nombre en la cirugía, lo que a él le importaba era que a Diego lo operara el mejor”.
“Ahí fue cuando salió el informe y Luque salió como primer cirujano”, añadió, en referencia a la operación, que fue llevada a cabo por un equipo de cuatro médicos encabezado por el cirujano Pablo Rubino.
Durante una audiencia el martes de la semana pasada, Stinfale declaró que su intervención fue a pedido de Maradona y que Gianinna, una de las hijas del ídolo, estuvo de acuerdo con él en que Luque no podía llevar a cabo la cirugía.
“Como yo había tenido un fuerte encontronazo, yo le dije (a Luque) no te saques el camisolín, di que lo operó el equipo que armaste, no digas que lo operaste tú, no mientas en nada porque en esta causa todo se sabe”, reveló Stinfale, que sin embargó no ofreció información en su testimonio sobre la falsificación del informe médico.
Tras la declaración de Benvenuti, se espera que se presenten este jueves frente al Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°3 de San Isidro, en las afueras de Buenos Aires, otros médicos que trataron al astro poco antes de su fallecimiento.
Además de Luque, son juzgados en este proceso la psiquiatra Agustina Cosachov, el psicólogo Carlos Díaz, la doctora y coordinadora de la empresa Swiss Medical Nancy Forlini, el médico Pedro Di Spagna, el coordinador de enfermeros Mariano Perroni y el enfermero Ricardo Almirón.
La enfermera Gisela Madrid también está procesada pero enfrentará un juicio por jurados, tal y como solicitó.
En este proceso, los jueces Maximiliano Savarino, Verónica Di Tommaso y Julieta Makintach deberán determinar si siete de los ocho acusados son culpables del delito de homicidio simple con dolo eventual, que tiene una pena máxima de 25 años de prisión.
PACIENTE DIFÍCIL
Rodolfo Benvenuti, cirujano que supervisó la última operación de Diego Armando Maradona poco antes de su muerte, dijo este jueves, durante una nueva audiencia del juicio que busca esclarecer si siete trabajadores de la salud son culpables por el fallecimiento del ídolo argentino, que el astro “era un paciente muy difícil, no quería que lo atendieran”.
“La verdad que yo lo que presencié ahí fue un paciente muy difícil. No quería que le hicieran la tomografía, no quería que lo atendieran, se quería ir”, declaró Benvenuti, sobre la visita que hizo a Maradona en la Clínica Olivos, donde fue operado por un hematoma subdural en la cabeza tres semanas antes de su muerte.
El cirujano acudió a la clínica por pedido del exabogado e íntimo amigo de Maradona Víctor Stinfale, para evaluar si Leopoldo Luque, neurocirujano que oficiaba de médico de cabecera del astro y que está imputado en la causa, era quien debía llevar a cabo la cirugía.
La operación fue finalmente llevada a cabo por un equipo liderado por el cirujano Pablo Rubino, aunque Benvenuti estuvo dentro del quirófano para asegurarse de que “todo transcurra con normalidad”.
Durante el tiempo que permaneció en la clínica, Benvenuti presenció cómo el ídolo argentino se negaba a someterse a una tomografía indicada por el equipo médico.
“Participé un poco con Maradona tratando de que se haga el estudio, que no hacerlo no tenía ningún sentido, que era lo más conveniente. Hubo un intercambio con Diego y aceptó hacérsela. Me puso como requisito para hacerse la tomografía, dijo que no quería que hubiera gente en el pasillo, que si había alguien no se hacía el estudio”, relató.
Fuente: Latinus