El gobernador Cuitláhuac García desestimó la denuncia presentada ante la FGR y aseguró que no le corresponde a las autoridades veracruzanas investigar porque ocurrió del lado de Puebla, entidad vecina
Veracruz.- Araceli Salcedo Jiménez, activista y defensora de derechos humanos, interpuso una denuncia penal ante la Fiscalía General de la República (FGR) por el asalto que sufrió el sábado pasado en la autopista Orizaba-Puebla y lamentó que la inseguridad sea un tema que no se resuelve en Veracruz.
En tanto, el gobernador de la entidad, Cuitláhuac García, desestimó el suceso al aclarar que no se registró del lado de Veracruz y que corresponderá atenderlo a las autoridades de Puebla. Ante ello, el senador electo morenista Manuel Huerta reviró: “No se puede tapar el sol con un dedo”.
El que fuera delegado de los programas sociales del gobierno federal acusó que la situación de inseguridad que se registra en el tramo de la autopista 150D Orizaba-Puebla ha sido una constante en las Cumbres de Maltrata.
En conferencia de prensa, en la zona centro de Xalapa, Huerta refirió que esta situación de inseguridad agravia a todos los veracruzanos.
“Espero que Rocío Nahle presente una buena propuesta y que no sólo sea cambiar el nombre de la policía. Que no nada más cambie el nombre a una institución, porque eso de nada ayuda, el cambiarles el uniforme. Se necesita un cambio de actitud, respetando los derechos humanos”, señaló.
García dijo que la víctima menciona el lugar de los hechos como un municipio de Puebla: “Es en esa zona colindante con Veracruz, pero del lado de Puebla” y refirió que la fiscalía de aquel estado tiene esa información: “Nosotros nos mantenemos atentos, reforzamos nuestra zona y seguiremos dándole seguimiento al hecho”.
Además, arremetió en contra de los medios de comunicación desestimando los reportes: “Tampoco es así una ola de asaltos, como los medios amarillistas han estado publicando”.
Tras el asalto de Araceli Salcedo, el representante de la oficina en México del alto comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Alán García Campos, exigió a las autoridades mexicanas garantizar la protección efectiva de las personas que buscan a desaparecidos.
Mostró su preocupación de que madres buscadoras de desaparecidos veracruzanas, como la defensora de derechos humanos, sean víctimas de la delincuencia que “opera en total impunidad en las carreteras limítrofes de Veracruz”.
Salcedo Jiménez acudió a la Ciudad de México para interponer la denuncia penal contra quien resulte responsable, asentada en la carpeta de investigación: FED/CDMX/SPE/0004582/2024 24/08/, por el delito de robo, en el kilómetro 231 de la autopista Orizaba-Puebla y aclaró que se hacía acompañar de su escolta.
La activista y defensora de los derechos humanos, criticó que el asalto en el que un comando armado a punta de pistola la despojó de su camioneta en que viajaba acompañada de su hijo, su nuera y tres menores de edad, ocurriera a menos de 1.5 kilómetros de un retén que mantiene la Guardia Nacional sobre esta vía de comunicación.
“Lo más terrible de todo es que, a un kilómetro y medio de donde nos asaltaron, está un retén de la Guardia Nacional con dos camionetas permanentes y personal, y después de ese retén, a casi dos kilómetros, hay otro retén de la Guardia Nacional con dos camionetas permanentes. Una patrulla de la Guardia Nacional los siguió, pero no logró alcanzarlos, lo cual parece raro, pues ellos no tenían el sensor y esa camioneta se debió haber detenido a los 10 o 15 kilómetros como máximo”, señaló Araceli Salcedo.
“Mi hijo conducía, yo iba copiloto y atrás mi nuera y mis tres nietos, de ocho y 10 años, y un bebé de 10 meses de edad, pensé que los asaltantes se querían llevar el tráiler, por lo que retrocedimos hasta que ya no se siguieron moviendo, porque uno de los delincuentes le apuntó a mi hijo a través del parabrisas, nos insultaron y amenazaron y nos quitaron los celulares y, a mi nieto de 10 años, una consola de videojuegos, lo mismo que a mi escolta, quien iba en un vehículo detrás de ellos”, explicó.
Fuente: Latinus