El proyecto propone declarar que la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México y otras dependencias son autoridades responsables que tienen la obligación de coordinarse para mejorar la salud y condición física de la elefanta Ely
La Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) dejó en lista el caso de la elefanta Ely, un ejemplar de elefante africano hembra que habita el zoológico de Aragón en la Ciudad de México, y para la cual se promovió un amparo para mejorar sus condiciones de vida en cautiverio.
El proyecto, bajo la ponencia de la ministra Yasmín Esquivel Mossa, propone declarar que la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México y otras dependencias son autoridades responsables que tienen la obligación de coordinarse para mejorar la salud y condición física de la elefanta Ely, así como para adecuar el espacio donde habita.
“Lo cierto es que tanto la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente y la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México sí cuentan con facultades para velar por el bienestar animal”, se lee en el proyecto que se hizo público.
En octubre del año pasado, la SCJN resolvió atraer el caso de la elefanta Ely, también conocida como “la elefanta más triste del mundo”.
Desde 2021, un ciudadano promovió el juicio de amparo para que diversas dependencias del gobierno de la Ciudad de México, entonces encabezado por la hoy presidenta Claudia Sheinbaum, otorgaran una mejor condición de vida al elefante africano.
En abril de 2024, un juzgado federal ordenó que las autoridades capitalinas elaboren un plan integral de cuidados para el mamífero. También determinó que se le practiquen estudios de salud y comportamiento, así como que se estudiara su alimentación y niveles de vitaminas.
Ely llegó en 2012 al zoológico de Aragón luego de ser parte durante 25 años de espectáculos de circo, que le generaron problemas de salud. Desde 2021, organizaciones defensoras del bienestar animal solicitaron el traslado de la elefanta a un santuario, petición que se intensificó luego de que en redes sociales se divulgaran videos del espécimen con comportamientos anormales denominados zoocosis.
Fuente: Latinus