La magia de la guitarra clásica envolvió al Museo de Arqueología e Historia de El Chamizal (MAHCH) en un evento que trascendió las expectativas de los amantes de la música y la cultura con el concierto “Reflejos”, ofrecido por el maestro Carlos Benítez, celebrando sus 35 años de trayectoria artística.
Fue una velada íntima que deleitó a los asistentes con interpretaciones cargadas de emoción y virtuosismo, además el evento cultural se destacó por su atmósfera cálida y cercana, donde cada nota parecía conectar al público con la sensibilidad del guitarrista mexicano.
Con un repertorio cuidadosamente seleccionado, Benítez interpretó piezas como Samba en preludio de Baden Powell y Danzas Nocturnas de Luis G. Jordá, así como composiciones propias que reflejan su talento como creador, entre ellas El lirio de la hurí, Para un mar tranquilo y Sobre el viento.
Cada obra fue recibida con aplausos prolongados, dejando claro el impacto emocional que generó en los presentes.
Carlos Benítez, conocido por su versatilidad y su enfoque en géneros que abarcan desde la música tradicional mexicana hasta la bossa nova, reafirmó su lugar como uno de los grandes exponentes de la guitarra clásica.
Su interpretación no solo evidenció su maestría técnica, sino también su capacidad para transmitir historias y paisajes sonoros a través de las cuerdas.
El evento, organizado por el Instituto para la Cultura del Municipio de Juárez (IPACULT), fue una celebración de la riqueza artística de la región y de la trayectoria de un músico cuya influencia ha trascendido fronteras.
La directora del IPACULT, Myrna Judith Barajas Martínez, destacó la importancia de estos encuentros culturales para fomentar el acceso a expresiones artísticas de calidad, fortaleciendo el tejido cultural de la ciudad.
El concierto “Reflejos” no solo ofreció una noche inolvidable, sino que también reafirmó el compromiso de las instituciones culturales por crear espacios que acerquen el arte y la música a la comunidad.