El Kremlin pidió que la investigación que se realiza contra el fundador de Telegram, Pavel Durov, no se convierta en una persecución política
El Kremlin declaró este jueves que el fundador de la plataforma de mensajería Telegram, el multimillonario Pavel Durov, a quien este miércoles la Justicia de Francia dejó en libertad bajo fianza con cargos, sigue siendo ciudadano ruso y como tal tiene derecho a asistencia consular de su país de origen.
“Durov aún sigue siendo ciudadano ruso, y en cuanto a la obtención (por él) la ciudadanía francesa, aquí no sabemos nada, no es asunto nuestro”, dijo el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa telefónica diaria.
Agregó que Durov “tiene todo lo necesario para organizar su defensa legal”.
“Por supuesto, lo consideramos un ciudadano de Rusia y, si es necesario, en la medida de nuestras posibilidades, estaremos dispuestos a brindarle asistencia, como cualquier ciudadano Rusia”, dijo Peskov.
Eludió comentar la imputación de Durov, pero recalcó que “lo importante es que lo que está ocurriendo en Francia no se convierta en una persecución política”.
“El presidente de Francia (Emmanuel Macron) ha negado toda vinculación política, pero, por otro lado, se presentan determinadas acusaciones”, apuntó Peskov
La Justicia francesa imputó ayer a Durov, por cargos que van de blanqueamiento de crímenes a complicidad en la difusión de imágenes pederastas, y accedió a su liberación bajo control policial y bajo una fianza de 5 millones de euros.
La lista de delitos que se le atribuyen comprende complicidad en la administración de una plataforma en línea para permitir transacciones ilícitas de bandas organizadas, complicidad en estafas y en tráfico.
A eso se añade, entre otros cargos, una presunta responsabilidad del multimillonario de origen ruso por la difusión en Telegram de material de abuso sexual de menores.
También se le acusa de no colaborar con la Justicia ofreciendo datos e informaciones sobre posibles acciones delictivas y cargos relacionados con el funcionamiento y encriptado de la plataforma de mensajería.
La imputación de Durov, de 39 años, se produjo después de cuatro días detenido de manera provisional (el máximo legal dados los cargos por los que se le investigaba), tras su arresto el sábado pasado en el aeropuerto privado de Le Bourget, próximo a París.
Fuente: Latinus