Mark Rutte aseguró que el lugar de Ucrania corresponde dentro de la OTAN, sin embargo, Estados Unidos y Alemania consideran que no debería entrar mientras esté librando una guerra
El nuevo secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Mark Rutte, se comprometió el martes a apuntalar el apoyo occidental a una Ucrania devastada por la guerra y se mostró confiado en poder trabajar con cualquiera de los dos candidatos para la presidencia de Estados Unidos, el miembro más poderoso de la Alianza.
El nuevo máximo responsable civil de la OTAN destacó la importancia de mantener los vínculos transatlánticos entre Estados Unidos, Canadá y Europa, a poco más de un mes de las elecciones presidenciales estadounidenses que enfrentan al expresidente republicano Donald Trump y a la vicepresidenta demócrata Kamala Harris.
“Podré trabajar con ambos. Sea cual sea el resultado de la elección”, aseguró Rutte.
Además, en su primer discurso tras asumir el cargo, Rutte dijo que “no puede haber seguridad duradera en Europa sin una Ucrania fuerte e independiente”, y reafirmó el compromiso realizado por los líderes de la organización en 2008 de que “el lugar que le corresponde a Ucrania está en la OTAN”.
Las fuerzas del presidente de Rusia, Vladimir Putin, están haciendo avances en el este de Ucrania. El ejército de Kiev mantiene un inestable control sobre parte de la región fronteriza rusa de Kursk, lo que ha supuesto una inyección de moral temporal, pero a medida que aumentan las bajas, sigue en inferioridad en cuanto a armas y combatientes.
“El costo de apoyar a Ucrania es, con diferencia, mucho más bajo que el costo que tendríamos que afrontar si permitimos que Putin se salga con la suya”, dijo Rutte a reporteros horas después de que su predecesor, Jens Stoltenberg, le entregase las riendas de la alianza, además de un mazo vikingo para presidir futuras reuniones.
Pero el ingreso de Ucrania en la OTAN sigue siendo una posibilidad lejana. Algunos socios, empezando por Estados Unidos y Alemania, creen que no debería entrar mientras esté librando una guerra. Rutte declinó especular acerca de lo que debería ocurrir para que su adhesión se haga realidad.
Rutte sí habló de China, y en concreto del apoyo que brinda Beijing a Putin, al afirmar que “China se ha convertido en un facilitador decisivo para la guerra rusa en Ucrania. China no puede seguir alimentando el mayor conflicto en Europea desde la Segunda Guerra Mundial sin que eso afecte a sus intereses y reputación”.
Fuente: Latinus