El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, afirmó este sábado que “aún no hay certeza” sobre la muerte del jefe militar de Hamás en Gaza, Mohamed Deif, en un ataque dirigido en su contra en Mawasi, zona humanitaria en el sur de Gaza.
“Aún no tenemos absoluta certeza sobre la muerte de Deif y su mano derecha, Rafaa Salameh”, afirmó en rueda de prensa Netanyahu, quien autorizó la operación tras recibir inteligencia de que no había rehenes israelíes en la zona.
El Ministerio de Sanidad de Gaza, controlado por Hamás, ha confirmado que en el ataque de Mawasi esta mañana murieron 90 palestinos y más de 300 resultaron heridos.
El mandatario israelí dio una inusual rueda de prensa este sábado por la noche en Tel Aviv mientras en Jerusalén, donde se encuentra su residencia oficial, miles de personas protestaban para exigir un acuerdo de alto el fuego con el grupo islamista que permita liberar a los rehenes israelíes en el enclave.
Durante la protesta, Andrey Kozlov, uno de los cuatro israelíes rescatados en una operación del Ejército en Gaza que se saldó con la muerte de más de 200 palestinos, habló por primera vez desde su rescate para agradecer a Netanyahu que lo salvara, pero también para pedir que firme un acuerdo para traer de vuelta al resto de secuestrados.
Netanyahu, por su parte, aseguró que no está postergando el acuerdo, después de que algunos medios israelíes publicaran que el mandatario está proponiendo nuevas exigencias y endureciendo el tono deliberadamente para evitar un pacto.
El primer ministro aseguró que es Hamás el que trata de introducir nuevas exigencias, y defendió que no se moverá un ápice de la propuesta de acuerdo anunciada por el presidente estadounidense, Joe Biden.
Con todo, insistió en que la guerra en la Franja de Gaza no acabará hasta que Israel no cumpla todos sus objetivos, que pasan por eliminar las capacidades de gobierno de Hamás en el enclave.
En un comunicado, el líder opositor Benny Gantz, quien hasta hace poco era miembro con derecho a voto del ya disuelto Gabinete de Guerra israelí, dijo que la responsabilidad de cualquier víctima colateral durante el ataque contra Deif de este sábado es únicamente de los islamistas.
“El Ejército de Israel es el más moral del mundo”, dijo Gantz, favorito en las encuestas para liderar un gobierno alternativo al de Netanyahu, en un comunicado en el que criticó a la cúpula de Hamás por esconderse entre la población civil de Gaza y ponerla en peligro.
De acuerdo con las autoridades sanitarias gazatíes, de los 90 muertos en el ataque la mitad son mujeres y menores de edad.
El ataque tuvo lugar en el área de Mawasi, al oeste de la ciudad de Jan Yunis, designada “zona humanitaria” por las fuerzas israelíes, al comienzo de su operación en la localidad sureña de Rafah, a principios de mayo.
Los militares israelíes insistieron en que el lugar atacado era un complejo de Hamás, ubicado en una zona abierta, rodeado de árboles y edificios, y no en las tiendas de campaña de Mawasi, donde residen miles de desplazados.
Fuente: Latinus