El fotógrafo independiente Pablo Grillo fue uno de los lesionados durante la protesta de jubilados, de hace dos días, respaldada por cientos de hinchas de fútbol de diferentes equipos
El ultraderechista presidente argentino, Javier Milei, defendió el viernes la represión ejercida por la policía en la manifestación antigubernamental en la que un fotógrafo resultó gravemente herido por el disparo de un agente y afirmó que su gobierno se abocará a que los manifestantes que causaron desmanes terminen presos.
Por su parte, el colectivo Mapa de la Policía desmintió la versión de la ministra de Seguridad Nacional, Patricia Bullrich, en la que afirmó que el proyectil que impactó en la cabeza del fotógrafo Grillo “rebotó en una barricada”.
En su primera referencia pública a la violenta protesta del miércoles, Milei defendió el accionar de la ministra de Seguridad Bullrich y de la policía federal que se enfrentó con los manifestantes.
“El que las hace las paga, los buenos son los de azul y los hijos de puta que andan con trapos en la cara y rompen, queman autos y amenazan a la gente son los malos y tienen que ir presos y los vamos a meter presos”, dijo el mandatario en una charla ante los empresarios reunidos en una muestra agroindustrial.
El fotógrafo independiente Pablo Grillo fue uno de los más de 40 heridos durante la protesta de jubilados, de hace dos días en Buenos Aires, respaldada por cientos de hinchas de fútbol de diferentes equipos y que derivó en violentos enfrentamientos con las fuerzas de seguridad. Más de 120 manifestantes fueron detenidos, y horas después liberados, y más de una docena de policías sufrieron distintas heridas, según el gobierno.
Grillo sufrió fractura de cráneo y pérdida de masa encefálica tras recibir el impacto en la cabeza de una cápsula de gas lacrimógeno, por lo que fue operado en un hospital y se encuentra en estado grave. Según un video, el proyectil que le impactó fue lanzado desde una formación policial.
La agresión ha sido repudiada por reporteros gráficos, sindicalistas y opositores.
Milei defiende la mano dura ejercida por las fuerzas de seguridad en las protestas que se suceden con frecuencia en Buenos Aires y donde los manifestantes protagonizan desmanes. “Vamos defender a la República. No vienen contra mí, vienen contra ustedes, yo sólo estoy en el medio. Si yo acelero en las curvas, ahora voy a acelerar mucho más”, desafío el mandatario que lleva algo más de un año en el poder.
El que las hace las paga, los buenos son los de azul y los hijos de puta que andan con trapos en la cara y rompen, y amenazan a la gente son los malos.
La ministra de Seguridad Bullrich ha denunciado por los delitos de sedición, atentado al orden constitucional y asociación ilícita agravada a los “grupos organizados de barras bravas” de la veintena de clubes de futbol que, según el gobierno, participaron de la movilización por los jubilados frente al Congreso.
Además, defendió el accionar del policía durante la movilización y calificó lo sucedido como una situación de “extremísima gravedad”, con manifestantes que tenían armas blancas y de fuego preparados para “generar violencia”.
En una rueda de prensa, alegó que “se tomó la decisión de comenzar a dispersar a los violentos desde el primer momento” y agregó que lamenta “mucho” el estado de Grillo, pero también afirmó que quien disparó “el arma no letal, una grabada de gas, la utilizó de manera correcta”.
“Eso rebotó en una barricada con fuego que habían hecho los militantes violentos. Rebotó y por eso cambió la dirección y le pegó al fotógrafo militante que estaba ahí”, manifestó.
La denuncia, en manos del juez federal Sebastián Casanello, también apunta contra dos alcaldes del peronismo opositor de sendas localidades cercanas a Buenos Aires y contra un sindicalista, a quienes la ministra les adjudicó haber participado en la organización de la marcha donde, acotó, “la violencia ejercida fue premeditada”.
“Le tiraron a matar”: desmienten versión sobre accionar de policía contra Grillo
Una investigación del colectivo Mapa de la Policía, en la que participaron peritos científicos, desmintió la versión de la ministra de Seguridad Nacional, Patricia Bullrich, de que el proyectil que impactó en la cabeza del fotógrafo Grillo “rebotó en una barricada con fuego”.
Lanzaron el gas lacrimógeno como si fuera una bala. Grillo no fue herido por una mala fortuna: le tiraron a matar.
Con la labor de los peritos científicos Guillermo Pregliasco y Martín Onetto, este colectivo especializado en analizar la violencia policial realizó una reconstrucción del momento en que el proyectil impactó sobre Grillo, mediante la comparación de imágenes y el análisis del sonido del disparo, y revelaron la posición del policía que dispara, ubicado al lado de un camión lanza agua.
“En nuestra reconstrucción se puede ver con claridad el lugar específico de donde salió el disparo y el ángulo de tiro horizontal. Lanzaron el gas lacrimógeno como si fuera una bala. Grillo no fue herido por una mala fortuna: le tiraron a matar”, dice el video que publicaron en sus redes sociales.
“La sistematicidad con la que se observa que diferentes efectivos dispararon de modo irregular indica que la responsabilidad es de los jefes policiales y especialmente de la ministra Bullrich”, añadieron.
De acuerdo al protocolo internacional, este tipo de armas no se pueden disparar con trayectoria horizontal sino con trayectoria parabólica no menor de 45 grados, según explicó al canal C5N de la televisión argentina el perito balístico Juan Escobar.
Fuente: Latinus