Protección Civil de Tamaulipas dijo que la ciudad más afectada de lado mexicano era Reynosa, pero que también había riesgo para las localidades fronterizas de Río Bravo, Miguel Alemán y una parte de Matamoros, vecina de Brownsville
La intensa lluvia que se registró la víspera a lo largo de la frontera entre Texas y México disminuyó el viernes, pero los rescates continuaban un día después de que las fuertes tormentas atraparan a residentes en sus hogares, obligaran a conductores a abandonar sus vehículos en carreteras inundadas y forzaran el cierre de un aeropuerto. Al menos cuatro personas murieron, tres en Texas y una en México.
Funcionarios del condado texano de Hidalgo dijeron en un comunicado que no tenían más información por el momento sobre las tres muertes, excepto que estaban relacionadas con tareas policiales.
El muerto por ahogamiento en México fue un adulto mayor de la ciudad de Reynosa, Tamaulipas, informó el gobierno del estado.
En Harlingen, Texas, funcionarios dijeron que su ciudad recibió más de 53 centímetros de lluvia esta semana, y la mayor precipitación se registró el jueves, lo que causó inundaciones que llevaron a las autoridades a rescatar a más de 200 residentes, mientras que otras 200 personas aún esperan ser rescatadas .
“Este ha sido, por supuesto, un evento histórico y desafiante para la ciudad. Pero Harlingen es fuerte. Hemos enfrentado adversidades antes y superaremos esto juntos”, dijo la alcaldesa Norma Sepulveda en una conferencia de prensa el viernes por la tarde.
En la localidad de Reynosa, Tamaulipas, videos subidos a redes sociales mostraban a efectivos militares caminando con el agua hasta el pecho por calles anegadas de esa localidad, vecina de McAllen, donde los medios locales reportaban el viernes que había personas atrapadas en sus casas. En esa ciudad, 172 fueron alojadas en albergues temporales.
En Álamo, Texas, la policía y el departamento de bomberos respondieron a más de 100 rescates en agua, incluyendo personas atrapadas en sus vehículos o en sus hogares, dijo el jefe del Departamento de Bomberos, R.C. Flores, en una conferencia de prensa el viernes por la tarde .
Las autoridades estimaron que un par de cientos de hogares en Álamo se inundaron debido a las fuertes lluvias.
Flores dijo que Álamo era una de muchas ciudades en Rio Grande Valley, en el sur de Texas, que se inundaron y sufrieron daños por las tormentas del jueves, pero que todas estaban trabajando para ayudar a sus residentes .
“Estamos evaluando la situación cada hora. Estamos saliendo constantemente, no sólo en nuestra ciudad”, dijo Flores. “Sólo porque la tormenta haya terminado, no significa que las emergencias y el desastre hayan terminado. Vamos a seguir trabajando tanto como sea necesario”.
El alcalde de Weslaco, Adrian Gonzalez, expresó que su ciudad se inundó con aproximadamente 36 centímetros (14 pulgadas) de lluvia, lo que dio pie a entre 30 y 40 rescates de automovilistas y residentes atrapados en sus hogares por el aumento de las aguas.
“Es una tormenta histórica y está afectando a todo el valle, no sólo a Weslaco. Es simplemente demasiada agua en un periodo muy corto”, comentó González a los periodistas en una conferencia de prensa.
Las imágenes de televisión de comunidades inundadas en el sur de Texas mostraban varios autos abandonados en calles anegadas el jueves y a conductores esperando en las aceras a que las aguas de la inundación retrocedieran.
Entre 15 y 30 centímetros (6 y 12 pulgadas) de lluvia cayeron en partes del sur de Texas en las últimas 24 horas, según el Servicio Meteorológico Nacional estadounidense. En el noreste mexicano fueron entre 20 y 31 centímetros, indicaron las autoridades mexicanas.
En el condado de Cameron, los funcionarios pidieron al gobernador Greg Abbott que declarara un desastre para el condado después de que más de 43 centímetros de lluvia causaron inundaciones significativas.
“La cantidad de lluvia que recibimos ha impuesto un récord, y no de una buena manera. Todos los recursos del condado están siendo utilizados en este momento, y estamos asistiendo en todas las formas posibles”, publicó en Facebook el juez del condado de Cameron, Eddie Treviño, Jr., el principal funcionario electo del condado.
El Aeropuerto Internacional del Valle en Harlingen fue cerrado el viernes y todos los vuelos fueron cancelados debido a las inundaciones en el área.
“Estamos trabajando incansablemente para reabrir y enfocados en garantizar la seguridad”, señalaron funcionarios del aeropuerto en un comunicado.
Más de 3 mil 400 clientes en varios condados del sur de Texas seguían sin electricidad el viernes por la tarde, según AEP Texas.
En el estado mexicano de Tamaulipas, Luis Gerardo González de la Fuente, director de Protección Civil, dijo el viernes que la ciudad más afectada era Reynosa, pero que también había riesgo para los habitantes de las localidades fronterizas de Río Bravo, Miguel Alemán y una parte de Matamoros, vecina de Brownsville.
En el área afectada se desplegaron 640 efectivos militares para la atención de la población afectada. Las autoridades indicaron también que durante el viernes se estaba restableciendo la electricidad conforme bajaba el nivel del agua pero no aclararon cuántas personas seguían todavía sin este servicio.
Una advertencia de inundación seguía vigente para partes del sur de Texas, incluidos los condados de Cameron, Hidalgo y Willacy, hasta el viernes por la tarde, según el Servicio Meteorológico Nacional.
“Hay una pausa en la lluvia esta mañana, lo que permitirá que las aguas de la inundación retrocedan gradualmente, pero aún necesitaremos estar atentos al desarrollo de lluvias y tormentas aisladas nuevamente esta tarde”, informó el Servicio Meteorológico Nacional en redes sociales. “Cualquier lluvia adicional causará rápidamente problemas de inundación dada la intensa lluvia que ya ha caído”.
Una escuela secundaria en Álamo estaba programada para permanecer abierta como refugio para los residentes hasta el viernes. Se había abierto un refugio en Weslaco y las autoridades en Harlingen habían abierto el centro de convenciones de la ciudad como albergue.
Más de 20 distritos escolares y campus universitarios del sur de Texas cancelaron clases el viernes debido al clima severo y las inundaciones.
Fuente: Latinus