Las fuerzas israelíes bombardearon la ciudad de Gaza a primera hora del lunes, con el envío de columnas de tanques al corazón de la ciudad desde distintas direcciones en lo que, de acuerdo con los residentes, fue uno de los ataques más intensos desde el 7 de octubre.
El Servicio Civil de Emergencias de Gaza dijo que creía que decenas de personas habían muerto en zonas del este de Gaza, pero que los equipos de emergencia no habían podido llegar hasta ellas debido a las ofensivas en curso en los suburbios de Tel Al-Hawa, Sabra, Daraj, Rimal y Tuffah.
El ejército israelí afirmó en un comunicado que había montado una operación contra la infraestructura miliciana en la Franja de Gaza y que había puesto fuera de combate a más de 30 combatientes que suponían una amenaza para las tropas israelíes.
El fin de semana, Hamás dio su aprobación inicial para una propuesta respaldada por Estados Unidos para un cese del fuego gradual en la Franja de Gaza, abandonando la exigencia de que Israel se comprometa por adelantado a poner fin a la guerra.
El aparente compromiso del grupo militante –que controlaba la Franja Gaza hasta que desencadenó la guerra con un asalto a Israel el 7 de octubre– podría contribuir a la primera pausa en los combates desde el pasado noviembre y sentar las bases de nuevas negociaciones para poner fin a una devastadora guerra de nueve meses. Sin embargo, todas las partes advirtieron que el acuerdo no está garantizado.
Además, al menos cinco periodistas palestinos murieron en los ataques israelíes de las últimas horas en la zona centro de la Franja de Gaza, con lo que suman 158 comunicadores muertos en el enclave desde el inicio de la guerra, de acuerdo con datos del gobierno de Hamás.
La guerra de Gaza es desde hace meses el conflicto más letal para periodistas, según han denunciado organizaciones derechos humanos y de libertad de prensa.
Fuente: Latinus