Rishi Sunak acudió este viernes al Palacio de Buckingham, residencia de la familia real británica, para presentar su dimisión como primer ministro, como marca la tradición constitucional, antes de que asuma el poder el líder laborista, Keir Starmer.
Tras abandonar por última vez la residencia del 10 de Downing Street como jefe del Gobierno, Sunak, acompañado por su mujer, Akshata Murty, acudió al palacio para la formalidad de rigor.
Después de esta audiencia, el político conservador abandonará el palacio por una puerta trasera, sin ser visto por los medios, y se estima que volverá a su circunscripción electoral en el norte inglés.
Sunak continuará como líder “tory” hasta que la formación inicie el proceso para elegir a un sucesor.
Tras la salida de Sunak, será el turno para Keir Starmer de acudir al palacio para recibir la petición del monarca de que forme el nuevo gobierno del Reino Unido.
El Partido Conservador sufrió una derrota histórica al perder más de 240 escaños y quedarse con 119, menos del nivel más bajo registrado por esa formación en 1906, cuando sacó 156 escaños.
En una declaración ante la residencia oficial del número 10 de Downing Street, antes de presentar la renuncia como jefe del Gobierno al rey Carlos III, Sunak subrayó que el pueblo británico ha “enviado un mensaje claro” y al final es el único juicio que importa.
Acompañado por su mujer, Akshata Murty, Sunak tuvo palabras de elogio hacia el líder laborista, vencedor de los comicios, Keir Starmer, del que dijo es un político “decente al que respeto”.
Fuente: Latinus