El pasado 9 de octubre se aprobó en el Senado la reforma al artículo 123 constitucional, que establece que el aumento al salario mínimo no podrá ser menor a la inflación
Después de que el Senado de la República aprobara la reforma al artículo 123 constitucional, el cual establece que el aumento al salario mínimo no podrá ser menor a la inflación, al momento ha sido avalada por siete congresos locales.
Michoacán, Tamaulipas, Ciudad de México, Sinaloa, Tabasco, Campeche y Durango ya aprobaron la reforma.
Para alcanzar el rango constitucional, una reforma necesita la aprobación de mínimo 17 estados.
De acuerdo con el Senado, el dictamen tiene como objetivo mejorar las condiciones laborales de las personas, además de que los salarios puedan satisfacer sus necesidades.
“El dictamen precisa que las maestras y los maestros de nivel básico de tiempo completo, policías, guardias nacionales, integrantes de la Fuerza Armada permanente, así como médicos y enfermeros, percibirán un salario mensual que no podrá ser inferior al salario promedio registrado ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS)”, indicó el Senado.
En el Congreso de la Ciudad de México la reforma fue avalada con 53 votos a favor, mientras que en Tamaulipas obtuvo 35 votos a favor para su aprobación.
“Por unanimidad se aprobó la minuta que establece que los salarios mínimos, como la revisión de los mismos, nunca estará por debajo de la inflación, por lo que las y los diputados garantizan que sean suficientes para satisfacer las necesidades de la gente” informó el Congreso de Durango.
Por otra parte, durante su discusión en el senado el pasado 9 de octubre, Ricardo Anaya planteó que el salario mínimo, pese al aumento que ha tenido, todavía no alcanza para que una familia viva fuera de la pobreza.
“La presidenta Sheinbaum, creo, comparte esta lógica, porque ha estado hablando de que debe aumentar el salario mínimo a 2.5 canastas, lo cual da unos 11 mil 400 pesos. Pero el promedio de las familias mexicanas no es de 2.5 integrantes, y no es justo que una persona gane lo que el propio Estado considera justo, y su familia viva en la pobreza. Nuestro planteamiento es que sigamos avanzando, la meta tiene que ser canasta no alimentaria, más canasta alimentaria multiplicado por 3.4: a pesos de hoy, 15 mil 500”, dijo.
Fuente: Latinus
