Daniel Bautista Vásquez contaba con medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y había recibido amenazas
El cuerpo de Daniel Bautista Vásquez, hermano de una víctima de tortura en 2020 a manos de la policía de Tlaxico, fue hallado en ese mismo municipio de Oaxaca a poco más de una semana de que se reportara su desaparición.
A través de un comunicado, el Centro de Derechos Humanos y Asesoría a Pueblos Indígenas (Cedhapi) exigió que se esclarezca el caso y descartaron que la víctima haya fallecido a causa de un atropellamiento.
Agregaron que la víctima contaba con medidas cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y que había recibido amenazas.
El escrito explica que el pasado lunes 9 de septiembre, la Fiscalía General del Estado (FGE) de Oaxaca les notificó sobre el hallazgo de un cuerpo que portaba una placa metálica con el nombre de Daniel Bautista.
Denunciaron que el cuerpo fue enterrado sin que se haya notificado a los familiares o esclarecido la razón de su defunción.
Por ello, acudieron con el vicefiscal de Valles Central, quien les notificó que la carpeta de investigación de Bautista no incluía información referente a la placa que lo identificaba, elemento que la fiscalía había mostrado —en una fotografía— a los familiares.
Esa irregularidad causó “incertidumbre y desconfianza” entre los familares de la víctima, quienes responsabilizan a la FGE de ocultar la evidencia.
“Responsabilizamos al agente del Ministerio Público de la mesa 5 de la Villa de Etla (comunidad de Tlaxico) de ocultar evidencias que entorpecieron la entrega inmediata del cuerpo a sus familiares”, acusaron.
Fuente: Latinus